¿Por qué son importantes la salud, la seguridad y el bienestar en la construcción y el entorno construido?

La salud, la seguridad y el bienestar son la base de toda la actividad del sector de la construcción y uno de los principales problemas que deben abordar los equipos de todos los niveles.

Los programas de salud, seguridad y bienestar basados en las mejores prácticas y aplicados de arriba a abajo impulsan el éxito y la sustentabilidad de las organizaciones e impulsan las economías a nivel mundial al desbloquear nuevas oportunidades comerciales. Ayudan a una organización a dirigir sus actividades para gestionar el cumplimiento y satisfacer las normas internacionales y las obligaciones contractuales.

Salvaguardar el bienestar de los trabajadores, incluido el ámbito cada vez más importante de la salud mental, ayuda a mantener la continuidad de la empresa al reducir la escasez de personal y evitar retrasos en los proyectos. También genera confianza entre los trabajadores y la cadena de suministro, lo que a su vez mejora la resiliencia  y la agilidad de la organización. Esto asegura a las empresas responsables un lugar en el futuro de la construcción, y protege su estatus como lugar deseable para trabajar.

La salud y la seguridad siempre han sido una preocupación dentro del entorno construido, con los riesgos físicos para los trabajadores establecidos como un desafío particular. La construcción también es un entorno volátil en el que cualquier parte de una estructura en constante cambio puede colapsar alrededor de los trabajadores sin previo aviso.

Una causa común de lesiones son las caídas de los trabajadores, tanto desde la altura como desde el nivel del suelo, donde los obstáculos grandes, en particular los que están en movimiento, crean muchos peligros. El levantamiento pesado y el manejo manual de la planta y los materiales pueden pasar factura físicamente y presentan desafíos con una fuerza laboral que envejece. Pueden surgir problemas de mala salud a corto y largo plazo debido al ruido, las vibraciones y la exposición al polvo, especialmente cuando la extracción de polvo es deficiente y no se proporciona el equipo de protección personal (EPP) correcto.

La tecnología está contribuyendo a reducir la escasez de personal cualificado, atrayendo y reteniendo a los trabajadores del sector. También tiene el potencial de mejorar la gestión de la salud y la seguridad, ya que la digitalización estratégica permite la medición y el seguimiento casi instantáneos de los peligros, así como herramientas digitales como el BIM que ayudan a reducir aún más los riesgos y los accidentes.

El distanciamiento social de los trabajadores también se ha convertido en un problema desde la pandemia del COVID-19, lo que pone de relieve la preocupación establecida sobre cómo la forma en que las personas se mueven por los espacios de trabajo afecta a su seguridad en el entorno construido.

Al igual que en muchos otros sectores, la pandemia ha hecho que el bienestar mental en la construcción ocupe un lugar prioritario en la agenda, ya que ha creado incertidumbre e inestabilidad, y ha perturbado las pautas de trabajo existentes y puesto en tela de juicio el equilibrio establecido entre el trabajo y la vida privada.

Junto con la diversidad y la inclusión, la salud mental se ha convertido en un área clave en la que las organizaciones deben centrarse para hacer frente a la escasez de personal, fomentando una mano de obra leal y apoyada que contribuya a su supervivencia a largo plazo. Estas cuestiones relativas a las personas se abordan en el modelo Prioritizing People© de BSI, que establece un marco de mejores prácticas para el bienestar en el lugar de trabajo que impulsa la confianza y fomenta una cultura de la atención.

Hay cinco elementos centrales de un plan exitoso para la gestión de la salud y la seguridad, todos los cuales se aplican en el entorno construido:

• Compromiso de liderazgo y gestión: el equipo de gestión debe predicar con el ejemplo, creando una cultura segura y positiva para todos los empleados.
• Una fuerza laboral cualificada y capacitada: todos los empleados deben estar capacitados en salud y seguridad.
• Comunicación clara: asegúrese de que los mensajes se compartan a través de todos los canales de comunicación para mantener a los empleados informados y seguros.
• Mejora continua: mantenga un entorno en el que se confíe y se involucre en las personas.
• Marcos formales: las empresas necesitan una estructura que administre sus requisitos de salud y seguridad de manera más efectiva, incluida una política y un plan.

Nuestros equipos de especialistas tienen un conocimiento directo de la gestión de la salud, la seguridad y el bienestar dentro de la construcción y el entorno construido. Tanto si su organización cuenta con un programa de salud, seguridad y bienestar que necesita mejorar como si acaba de iniciar el camino hacia la creación de uno, le ayudaremos a comprender y aplicar soluciones de salud y seguridad en su organización para conseguir unas condiciones de trabajo más seguras y saludables que protejan a las partes interesadas, permitiéndole reducir los riesgos operativos y minimizar los peligros.